Frenazo de entes de control a las vigencias futuras
El caso del Valle
La noticia no tomó por sorpresa a la región. El proceso de las vigencias futuras del Departamento fue duramente cuestionado por la Contraloría regional, entidad que antes de adquirirse esos compromisos advirtió sobre la inconveniencia para el Valle debido a los problemas fiscales que tienen las arcas públicas de la región.
El Contralor Departamental, Carlos Hernán Rodríguez, aseguró que “la actual circular nos da la razón ante las advertencias previas que hizo este despacho tanto a la Asamblea como al Gobierno regional”.
Rodríguez dijo que la decisión de reversar las vigencias futuras, tal como lo solicita la nueva circular, debe ser tomada por el actual Gobernador, Francisco Lourido, “pero la instrucción de los organismos de control nacionales y el Ministerio de Hacienda es muy clara: hay que derogar las vigencias futuras”.
El Contralor dijo, que sin embargo, tomar esa decisión le costará al Departamento porque ya fueron contratadas las obras y los contratistas han incurrido en gastos. “Advertimos sobre esta situación, que no hará otra cosa que agravar la situación fiscal regional y causar un detrimento patrimonial”, señaló el titular del organismo de control.
Como se recordará, en febrero de 2009 fueron aprobadas compromisos de vigencias futuras por $650.000 millones por parte de la Asamblea del Departamento.
Posteriormente la Gobernación contrató, a través de licitaciones, a tres firmas contratistas para desarrollar 75 obras de toda clase en los 42 municipios del Valle.
Las licitaciones fueron adjudicadas en diciembre del año pasado y los contratos fueron firmados en enero de este año.
El secretario Jurídico de la Gobernación, Jaime Escobar, dijo que está analizando la nueva circular para tomar una decisión final.
Yiminson Figueroa, presidente de la Asamblea del Valle, dijo que “ya no se pueden echar para atrás unas vigencias futuras que están contratadas. Sería una irresponsabilidad”. Agregó que lo que debe hacerse es exigirle a los contratistas el cumplimiento de los contratos.
El caso de Cali
El mes pasado, el Concejo de Cali aprobó vigencias futuras por $210.551 millones para pagar las obras que se adelantan en el sistema masivo MÍO y para ejecutar mejoras locativas en el estadio Pascual Guerrero y un grupo de escuelas de la ciudad.
De acuerdo con el director de Hacienda, Juan Carlos Botero, las vigencias futuras de Cali tienen todo el sustento jurídico porque fueron aprobadas siguiendo las directrices de la Ley 819 de 2003 que habla de las vigencias futuras.
“Además, estos compromisos fueron aprobados con proyectos específicos. El MÍO está en ejecución y los trabajos del estadio Pascual Guerrero y las escuelas fueron claramente especificados en el Concejo cuando se pidieron las facultades para comprometer recursos en vigencias futuras”, dijo Botero.
Entre tanto, la contralora Municipal, Alma Carmenza Erazo, no cree que las vigencias futuras recientemente aprobadas por el Concejo tengan algún inconveniente porque las obras no serán financiadas con recursos de crédito sino con recursos propios del Municipio, procedentes de la estampilla pro-deporte y la sobretasa a la gasolina.
La presidenta de la Comisión de Presupuesto del Concejo de Cali, Clementina Vélez, aseguró que la ciudad puede estar tranquila porque las vigencias futuras aprobadas por el Cabildo están dirigidas a obras en ejecución.
“El MÍO, por ejemplo es una realidad, igual pasa con la remodelación de las escuelas y lo mismo ocurre para el Estadio Pascual Guerrero”.
Aseguró que los recursos aprobados “no irán a parar a proyectos fantasmas”.
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